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Bienvenido a la capital de Alemania: ¡das ist Berlin!

Una de las estampas características de cada verano son las playas de los países mediterráneos llenas de turistas del norte de Europa que intentan escapar del frío y de las lluvias estivales. Esta típica imagen no es extrapolable a todos los destinos. Hoy te traemos una alternativa ideal a las vacaciones de sol y mar.

¿Quieres saber más?

Fernseherturm, en Alexanderplatz.

¿Cómo es el verano en Berlín?

En contra de la percepción popular, el clima veraniego en Berlín es cálido y soleado, con una agradable sensación.

Si ya te estás sofocando solo de pensarlo no te preocupes, hay truquitos para poder amenizar estos días de altas temperaturas.

Puedes incluso disfrutarlo en modo low cost, ya que Berlín, a pesar de ser una capital europea, es relativamente barata comparada con otros destinos. Algo tan simple como coger un par de refrescos y tomártelas en cualquiera de los muchos parques que tiene la ciudad, es ya de por sí un planazo.

¿Qué hacer en Berlín?

Tienes opciones de sobra para elegir: desde Gleisdreick, dónde podrás ver el metro pasar por los puentes que lo rodean; Tempelhofer Feld, un antiguo aeropuerto que ahora se llena de cometas o Tiergarten, el pulmón más emblemático de la ciudad. Y si alguna de estas opciones te queda lejos, siempre puedes tirar del biergarten más cercano, ¡los hay a raudales!

Mauerpark, al este, famoso por hospedar al Flohmarkt más conocido de la capital, es otro de los jardines que no puedes irte sin visitar antes. Ahí encontraras desde cachivaches antiquísimos a piezas de delicada artesanía. Todo esto mientras el dulce aroma de las distintas culturas internacionales te acaricia el olfato, ya que existe una zona de food-trucks multicultural que te estará esperando para deleitar tu paladar con los sabores más tradicionales. Pero el itinerario berlinés no termina aquí. Y es que no sería un domingo perfecto sin música. Por eso, podrás afinar tus cuerdas vocales lanzándote a cantar alguna de tus canciones favoritas en el karaoke en vivo que se organiza en medio del parque, y que congrega cada semana a cientos de personas, tanto berlineses como turistas y curiosos. Y es que los mercadillos, sobre todo durante los fines de semana, es una actividad muy típica. ¡Además uno puede encontrar gangas impensables!

Eso sí, el verano no sería lo mismo sin poder disfrutar de un buen chapuzón, y aunque en Berlín no encontrarás playa (natural, claro), sí que está rodeada de lagos a las afueras cómo Wansee o Tegelsee, con acceso directo en transporte público. El agua está arraigada a la etimología de su nombre, ya que Berlín significaba terreno pantanoso. Otra opción menos lejana es recorrer la ciudad en barco por el rio Spree, un agradable tour que te mostrará las zonas más icónicas de la metrópolis mientras disfrutas de una refrescante agua con gas.

Tempelhofer Feld, un antiguo aeropuerto reconvertido en parque.

¿Qué no perderse en Berlín?

Todo esto sin olvidarnos obviamente de los infinitos must que ofrece la cuna del tecno, una ubre con una personalidad pintoresca que aúna historia, gastronomía, arte y cultura como pocos destinos en el mundo.

¿Lo mejor de todo? La mayoría de atracciones turísticas se encuentran relativamente cerca la una de la otra, pudiendo hacerlo todo a pie (o en bici, estando llenas de ellas por toda la ciudad).

Empezamos nuestro recorrido en Potsdamer Platz, una zona íntegramente nueva después de que fuera completamente destruida por los bombardeos de los aliados y que ahora ampara varios edificios modernos acristalados, entre los que destaca el Sony Centre y su cúpula futurista. Bajando la calle nos encontramos con el Monumento del Holocausto, un sentido recuerdo a todos los ciudadanos judíos que fueron víctimas del genocidio. Y justo al lado, delante de Tiergarten, llegamos al lugar más emblemático de la ciudad: la puerta de Brandeburgo. A escasos pasos se nos aparecerá imponente el Reichstag, (el parlamento alemán), encumbrado con su distintiva cúpula de cristal, diseñada por el prestigioso arquitecto británico Norman Foster y que simboliza la transparencia. La visita es gratuita, simplemente hay que registrarse previamente.

Puerta de Brandeburgo.

Siguiendo el camino que marca el río Spree llegaremos a la isla de los museos, emplazamiento que reúne a cinco reconocidos museos, ya sean de historia como el museo de Pérgamo, en el cual uno podrá encontrar cultura babilónica, o el de la Antigua Galería Nacional, con exposiciones de arte representativas. Antes de sentarte, relajarte y tomarte algo, puedes visitar la catedral (el Berliner Dom) y la torre de televisión (el Fernseherturm), coronando el centro de la famosa Alexanderplatz.

Si todavía tienes un poco de tiempo, no pueden faltar en la lista otros lugares simbólicos que se encuentran en otros barrios, cómo Checkpoint Charlie, el palacio de Charlottenburg o East Side Gallery, una parte del muro de Berlín convertida en la mayor galería de arte al aire libre del mundo.

Berliner Dom, la catedral de la ciudad.

¿Dónde alojarte en Berlín?

Con el itinerario y las maletas listas, se nos plantea la pregunta del millón: ¿dónde puedo hospedarme en Berlín? RIU Hotels & Resorts te trae la solución: ¡el hotel Riu Plaza Berlin!

Ubicado entre las estaciones de metro Wittenbergplatz y Nollendorfplatz muy cerca de Kurfürstendamm, la “milla de oro” de la ciudad, dónde encontrarás las marcas más lujosas posibles, y las famosas galerías KaDeWe. También a tiro de piedra tienes la iglesia de los recuerdos, la evangélica luterana Kaiser-Wilhem Gedänchstniskirche. Aunque meticulosamente conservada, te impresionará su estado de ruina, ya que fue bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial, siendo hoy un monumento protegido. Todo esto muy cerca de Zoologischer Garten, una de las estaciones con mejores conexiones del lugar, justo delante del zoo.

Como ves puedes disfrutar de todas las ventajas de los hoteles Plaza en nuestro establecimiento de 357 habitaciones y 4 estrellas. Desde el desayuno incluido a una localización inmejorable que te acercará a los secretos mejor guardados de la ciudad.

No te lo pienses más y disfruta de un verano al puro estilo berlinés con RIU.

El hotel Riu Plaza Berlin.